Muchos somos los españoles que intentamos hacernos un hueco en Londres. La mayoría de nosotros (por no decir el 100%) hemos tenido que abandonar a nuestra familia, a nuestros amigos y nuestras costumbres por culpa de la mala gestión y la poca vergüenza de nuestros políticos y banqueros.
Sin embargo hay un selecto grupo de españoles que viven muy bien en la capital inglesa. Todos ellos están encabezados por el gran Federico Trillo. El que fuera Presidente del Congreso de los Diputados y Ministro de Defensa (coincidiendo con el accidente del Yakovlev 42) ocupa, desde marzo de 2012, el cargo de Embajador del Reino de España ante el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
Por desgracia, las malas costumbres las estamos exportando y García Margallo prefirió nombrar embajador a un "amigo" en lugar de a un miembro del cuerpo diplomático. Y por si fuera poco, que ya sabemos que a los políticos del PP les gusta mucho eso de poner a gobernar a amigos o mujeres a dedo, el señor Trillo entró en Londres por la puerta grande, incluso conociendo a la Reina, sin saber hablar inglés.
Pero el señor embajador está triste porque no le vale con vivir en una de las embajadas más grandes de la ciudad. Ahora necesita un mayordomo.
Podrán optar al puesto, remunerado con 23.069 libras al año, aquellos mayores de 16 años, que hablen español e inglés (alguien tendrá que traducir al Embajador) y no tengan parentesco con los responsables del proceso de selección. Eso sí, hay que leer la letra pequeña. El beneficiado tendrá que convivir con Federico Trillo.
El mayordomo tendrá que ocuparse del "cuidado, gobierno y responsabilidad de la Residencia y de sus servicios, vigilancia y supervisión del personal de servicio, y todas aquellas tareas de la Residencia que, relacionadas con su categoría, le sean encomendadas por el Jefe de la Representación o la persona en quien éste pudiera delegar".
¡Para qué ser explotado por los ingleses cuando puedes estar sirviendo a un político español!
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