sábado, 17 de noviembre de 2012

2012-11-17. Noticias curiosas

EL COMERCIO 
Que la sanidad está muy mal no es ningún secreto. Si en España más vale no ponerse malo, en Brasil el panorama no es más prometedor. Dos ancianas han perdido la vida en el último mes en Río de Janeiro por una negligencia. Rejano Moreira Telles, de 23 años y estudiante de enfermería, inyectó en vena medio vaso de café con leche a una anciana de 80 años en su tercer día de prácticas. La joven ante la muerte de la paciente se justificó diciendo que “tenía conciencia del riesgo de administrar un alimento por vía intravenosa. Pero, como estaba todo junto, cualquiera se confunde”. Y, aunque parezca increíble, no es el único caso. Otra mujer de 88 años, Ilda Maciel, también perdió la vida cuando le suministraron sopa por vía intravenosa. 

"El romanticismo no es basura, el romanticismo es imaginación, es belleza. Además, en la basura se encuentran pequeñas cosas". Este es un fragmento de la película The Fisher King que es perfecta para la noticia de hoy. Nuestro protagonista es Wu, un señor tan enamorado de su esposa que ha decidido dedicarle todo su tiempo libre. La afortunada señora, amante de la música y la canción, tenía por deseo un piano. Desafortunadamente, Wu no tenía dinero así que se ha pasado los últimos 20 años de su vida recogiendo y vendiendo basura con su bicicleta. «Al principio me daba vergüenza por si me veía alguien conocido, pero luego me acostumbré y se convirtió en un hábito». Ha necesitado dos décadas pero por fin la señora de Wu podrá disfrutar con su piano teniendo al lado a su mayor fan. 

Que cada vez tengamos mayor acceso a la cultura no significa que estemos bien informados. Es extraño como aún hay gente, en pleno siglo XXI, que cree extrañas teorías o milagros. La inedia se presenta como una de estas panaceas. El documental Am Anfang war das Licht narra la experiencia del químico suizo Michael Werner en el momento que conoció a Prahlad Jani. Ambos aseguran que es posible vivir sin comer ni beber absolutamente nada ya que podemos alimentarnos de nuestra propia espiritualidad. Werner afirma que lleva sin comer once años y Jani no ha comido ni bebido en 70. Una práctica, esa de sobrevivir de la luz, muy útil en época de crisis. El problema es que parece ser que sólo le ha funcionado a estos señores y a Jasmuheen, una escritora australiana que en sus libros explica cómo hacer el proceso. Los libros y el documental no han sido suficientes para una mujer suiza de 50 años que ha fallecido al intentar seguir esta teoría. Con ella, y desde los años 90, ya han sido cuatro las personas que han perdido la vida intentando convertirse al respiracionismo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario